jueves, 24 de mayo de 2012

Una mañana inesperadamente especial.

Noche del miércoles 23 de mayo de 2012. Me entero de que Aleix Espargaró, que si no sabéis lo que significa para mí, es que no me conocéis absolutamente nada, viene a Madrid. A una feria en Ifema, donde participa Power Electronics. "No puedes ir, Carmen, no te da tiempo", me digo a mí misma. Eran las 10 y media de la noche. Un rato después, tras haberle preguntado al propio Aleix la hora a la que estaría por la feria mediante un tweet, me lo pienso mejor. Acabé yendo.

Resulta que yo tenía médico por la mañana, a las 10. Que era justo la hora a la que abrían la feria y a la que Aleix me dijo que estaría por allí, por eso lo de "No me da tiempo". Pero mi padre me dijo que él iría por mí al médico, que fuese a la feria  a ver a Aleix... dicho y hecho. Esta mañana a las 7.30 estaba despierta para prepararme e irme a Ifema. Locura de Caar para ver a Aleix, volumen II (el Volumen I fue un intento fallido de verle en el aeropuerto, por cierto).

Después de los preparativos varios y comprobaciones de que lo llevo todo, salgo de casa a las 9 de la mañana. Dirección a la estación de Renfe. Me esperaba un viaje tranquilo por la hora que es, para nada hora punta, aunque algo largo. En tren hasta Atocha, luego cambio de andén y a Nuevos Ministerios, y de allí en Metro hasta Campo de las Naciones. Algo más de una hora que se presumía fácil. Fácil y tranquilo hasta que al llegar a la estación de Nuevos Ministerios e ir a la máquina para sacar el billete de Metro... me encuentro con que no tengo el monedero. Adiós Aleix, pensé. "Sigamos intentándolo", me vino a la mente justo después. Tras llamar a mi madre y darle el disgusto de turno, pregunté a una señora de seguridad que qué podía hacer... y ella más ancha que pancha, me dijo que me colara en el Metro. Eso hice. Colarme. Si total, eran cuatro estaciones.

Después de una ilegalidad permitida (¡me lo dijo la de seguridad!), llegué a Ifema (en el culo del mundo respecto de mi casa, por cierto) y empecé a agobiarme. Eso es enorme. Entré por donde pude y pregunté. Más o menos, preguntando a quien veía por allí, me fui guiando. Tenía que coger un autobús gratuito (MENOS MAL, porque no llevaba ni un duro) e irme a la otra punta del recinto. Una vez allí, tenía que registrarme para entrar a "Genera", que es el nombre de la feria. "Entrada: 20€". Mi vida entera. Me quedo sin verle. Con toda mi suerte, topé con un chico muy majo en la zona de registro, que no me cobró ni un euro cuando le dije que me habían robado. Bendito sea. Me dio el pase y me dijo que "ten cuidado para otras veces, que hay ferias muy estrictas y no podríamos hacer estas cosas". Yo, tras darle las gracias como cien millones de veces, pensé que eso me daba igual, a saber cuándo vuelvo por allí.

Ya con mi pase (ilegal, como cuando me había colado en el Metro), entré a la feria. Me fui en busca del stand de Power Electronics y... ¡¡¡Aleix!!! "Joder, lo que me ha costado llegar hasta aquí", pensé. Estuve un rato hablando con él y contándole lo que me había pasado con el monedero, a lo que él respondió dándome 10€ para volver. Le dije que 1,50€, que es lo que cuesta el billete de Metro... pero nada. Él es así. Enormidad se le queda tan corto... También le enseñé mi tatuaje. No puedo describiros su reacción, pero su cara lo decía todo. Ahora estoy más que orgullosa de poder decir que le llevaré siempre conmigo. :)

Mi tatuaje. "When nobody believes in you, believe in yourself".

Y tras estar unos 10 minutos charlando, él se fue a hablar con los directivos que había por allí. Gajes del oficio, lo llaman. ¿Y yo qué hago aquí ahora? Pues empecé a dar vueltas, prácticamente sin levantar la cabeza del iPhone y hablando por Whatsapp, y puedo deciros que aún no sé de qué trataba la feria. Si solo daba vueltas por darlas... siempre terminando en el mismo sitio: en el Stand de Power Electronics. Tras un par de vueltas (alguna más...), opté por quedarme allí al lado. Había un simulador bastante guay de 500cc (compitiendo contra los Criville, Doohan, Abe, Checa...) al que Aleix dio mucho uso, y todo sea dicho, en el que Aleix lo daba todo. ¡Qué pique! Jajajajajaja. Después de mirar embobada cómo lo hacía él y otros chicos que subieron, dije "¿Por qué no probar?" Y me subí. La verdad que es bastante complicado, ¡pero es súper divertido! De hecho me piqué y luego volví a subir... Jajajajaja!

Para terminar, me despedí de Aleix y le dije que intentaré ir a Montmeló. Todo sea por apoyar a una persona especial, para mí y para todo el mundo, porque el que es especial, no deja de serlo jamás. Y él es MUY especial.


PD: Todo esto yo sola. Ahí, a la aventura.

3 comentarios:

  1. ¿Has pensado que después de todas las trabas habidas y por haber conseguiste tu propósito? Así es la vida,mi niña,si piensas en positivo atraerás lo positivo...Lo del monedero una putada pero al menos lo has recuperado y piensa que siempre,siempre hay gente buena en el mundo que te echa una mano.
    Me alegro mucho por tu experiencia.Besos.Bell

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Sí, la verdad es que me he dado cuenta que, aunque todo se puso en mi contra, como yo he seguido intentándolo... lo he conseguido. Muchísimas gracias Bell, ¡besotes! :)

      Eliminar
  2. alaaa madre miaa que pasada tia lo que no te pase a tii uuff esta claro que ese dia la suerte estaba de tu parte e.e jaja me ha encantado la entrada de verdad un besazo grande se te quiere nena cuidate mucho y me alegro un monton por ti me ha encantado leerte

    ResponderEliminar